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Aunque el gobierno alemán busca incrementar la cantidad de propietarios de inmueble, los alquileres continúan siendo la opción más común para alojarse en ese país. Por tal razón el mercado inmobiliario tiene muy regulado el rubro de alquiler, esto dificulta a los propietarios rentar una vivienda; son muy cautelosos al decidir para evitar problemas con los arrendatarios.
Como en gran parte de Europa, el alquiler de un inmueble resulta caro, más aun si se trata de ciudades céntricas. En el caso de Alemania , Hamburgo, Múnich y Colonia; un alquiler puede sugerirle la mitad de su salario. Los turistas suelen solicitar apartamentos amoblados que resultan caros, más aun si lo han solicitado sin mucha anticipación. De otro lado, para las familias grandes resulta difícil encontrar viviendas de precio moderado.
Es posible que durante el año existan épocas en las que sea más fácil rentar alojamientos. La oferta y demanda suele ser distinta dependiendo de la estación en vigencia, por ejemplo, entre marzo y abril o entre septiembre y octubre es cuando existe mayor demanda.
Con la tabla llamada Mietspiegel, que lista todos los precios en cada área, puedes corroborar si el costo de alquiler es apropiado de acuerdo a la zona. Lo puedes hallar en el ayuntamiento local o en Mieterverein (Asociación de Inquilinos).
Si tienes dudas o tu alquiler excede el límite de lo legal, consulta un abogado o asociación de inquilinos.
